Si tienes dudas en el momento de la instalación de tu ascensor sobre cuál escoger entre todos los tipos de ascensores que existen, a continuación te contamos los tres principales tipos de ascensores según su funcionamiento y los requisitos que deben cumplir.
Ascensores Hidráulicos
El funcionamiento de estos ascensores se desarrolla mediante la presión que ejerce una bomba sumergida en un depósito de aceite a un cilindro en la cabina de elevación, a medida que el aceite va entrando en el cilindro la presión aumenta y como consecuencia la cabina sube, para el descenso simplemente se abre el paso de aceite de forma controlada.
Ventajas:
Esta modalidad de ascensores es una de las más seguras porque en caso de corte eléctrico, el ascensor podría descender de manera controlada accionando manualmente la llave del aceite. Y es más económico a largo plazo ya que consume menos energía y necesitan menor mantenimiento. No es necesaria la instalación de una sala de máquinas en la parte superior del ascensor.
Inconvenientes en su instalación:
Solo se puede instalar en edificios de poca altura y por lo general no son más lentos que otros tipos.
Ascensores electromecánicos
Los ascensores electromecánicos son los ascensores más populares y su funcionamiento radica en un motor eléctrico y el funcionamiento de poleas, mediante unos cables cuelga por un lado la cabina y por otro lado un contrapeso que sirve para estabilizar la carga.
Ventajas:
Suelen ser más rápidos que los hidráulicos y para edificios de más de 4 alturas suele ser más económico.
Inconvenientes en su instalación:
Su consumo es más elevado ya que tienen que usar la energía tanto para el ascenso como para el descenso y necesitan mayor mantenimiento. Es necesario una sala de máquinas en el hueco superior del ascensor.
Ascensores autoportantes
Por último nos encontramos con los ascensores autoportantes, son una modalidad de ascensores más novedosos y cuyo funcionamiento es parecido al de los ascensores electromecánicos, con la diferencia de que los autoportantes carecen de sala de máquinas, ya que ubican el sistema de tracción en dentro del propio hueco del ascensor.
Ventajas:
La instalación de los ascensores autoportantes es más sencilla, rápida de instalar, no necesita un gran espacio y suele tener un precio más económico.
Inconvenientes en su instalación:
No están pensados para grandes edificios.
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